9.

Bien. Ayer mi papá tuvo que ir a buscarme al liceo, ya que me desmayé y tuve otra crisis de pánico. Y dentro de mi poca conciencia me dieron un chocolate y un té, el que mi cuerpo no toleró y lo vomité antes de llegar a casa. Le dije a mi papá que algo me había caído mal.
Al llegar a casa me hizo acostarme y me preguntó si quería algo para comer. Me sentía muy débil, pero aún así no quería nada. Tan solo pedí un poco de agua, ya que si me deshidrataba, sabía que me iban a llevar al hospital, y eso si que no lo quería.
Luego de eso me dió fiebre. Tenía 39 grados. Dios, como odio tener fiebre! y luego de eso dolores de cabeza, de estómago, mareos y adivinen que mas... si, vómitos.
No podía probar nada porque tenía que correr al baño. Casi no dormí en la noche.
Hoy tenía prueba de biología pero mis padres me dejaron faltar al liceo, ya que no pude estudiar anoche y de seguro me vendría otra crisis o la fiebre.
En verdad, ya ni ganas tengo de salir de la casa.
Ojala que estos malditos dolores de cabeza se me quiten luego. Me ponen de mal humor.
La profesora le dijo a mi papá que sería bueno que me llevaran con un doctor por lo de mis crisis. Yo no quiero. Pero conociendo a mis papás, es obvio que lo van a hacer.
Puaj, odio los psicólogos. Desde que me llevaron cuando tenía... 5 años?.
Y fue por problemas alimenticios (dejé de comer).
En fin, creo que me iré a recostar un minuto, no me siento bien.
Besos, princesas.

8.

Tengo los dedos feos.
Se me ponen amarillentos e irritados. Llevo 3 días sin comer, pero ayer me emborraché, y creo que subiré de peso.
Quiero darle las gracias a todas las princesas que pasan por este lugar y me dan ánimos para seguir luchando día a día. No sé que habría sido de mi si no le hubiese contado esto a alguien, aunque sea "alguien" que no conozco.
Por eso, princesas, les digo que sin ustedes, me hubiese rendido hace días atrás.
Gracias.


Molly.

7.

No soy la única.
Estaba en séptimo básico, creo.
Mi mejor amiga... era casi como mi hermana.
Claro, han cambiado las cosas. Ya se encontró a otra.
Un día, luego de esas cosas de peleas y reconciliaciones, me pidió que la acompañara.
"Tengo algo que decirte". Mientras estabamos sentadas bajo un cerezo me dijo lo que yo ya sabía. Aunque suene patético, tengo un... sexto sentido. La gente me dice algo, y yo ya se todo. Y la mayoría de las veces, las palabras sobran. Pero, no va al caso. Ya tendré oportunidad para contar todo esto del color de mi aura.
"Tengo bulimia".
Los espejos se quebraron en mi pecho otra vez. Aunque estaba preparada, aunque ya sabía lo que me esperaba... No.
Quería pensar que estaba equivocada. Pero no fue así.
Estaba enferma. Mi amiga estaba enferma, al igual que yo. ¿Cómo podía ayudarla? ¿Cómo mierda?
No me sentía con la moral suficiente como para aconsejarla.
Me limité a lo típico.
"Sé que saldrás de esta. Sé que vas a poder". No quería que sonara como un "vamos a poder".
¿Por qué?.
Tenía que vivir a diario viendo como se debilitaba. Ver como sus nudillos de tornaban amarillos. Ver como sus manos se rompían.
Ver como se desmayaba, como andaba sin energías, como perdía... su vida.
Tenía, y tengo que soportar el echo de ver como a mi amiga día a día se la lleva Mia.




Al igual que a mi.

( )

Si te pasa algo, Martín, yo me muero.

( )

Cielos. No sabeis cuanto me gustaría estar sana. No sabeis cuanto te extraño, muchacho. No sabeis cuanto he mojado mi almohada por ti.
Quiero pensar que algún día voy a salir de esto. Sea como sea.
Quiero pensar que algún día volveré a encontrarte, Felipe.
Quiero pensar que es muy fácil salir de toda esta porquería.

¿Pero que he echo de mi?

Lo único que quiero es respirar tranquila.
Lo único que quiero, por la mierda, es estar tranquila, es tener una vida como la de las niñas normales, es ser... bonita.
No pido nada más, sé que no puedo pedir más.
Porfavor, ya no más.
Nunca me había visto tan debilitada, tan desgastada.
¿Algún día vas a volver,no?
Me lo prometiste. Prometiste estar conmigo para siempre. ¿Dónde estás?
Prometiste estar conmigo para siempre.





(Ahogaré mis creencias para tenerte en paz, vestiré como tu niñera para lavar tus pies hinchados. Tan solo no te vayas. No te vayas.



El amor verdadero espera.



Mierda, como me llega esta canción)

6.

"El estómago, el estómago".

Me desmayé. No fue la primera vez, claramente. Pero nunca había estado inconciente tanto tiempo. "Lo único que decías era eso, y algo de un chiquillo... Felipe?".
Creo que hubiese sido mejor que me dejaran ahi desmayada. "¿Que pasa?, ¿comiste algo hoy, verdad?".
Por supuesto que no. No iba a dejar atrás mi meta por ustedes, señores.
Me sentía mal aún, tenía ganas de vomitar y no sentía las piernas.
"¿Quien es Felipe?". Estaba esperando esa pregunta.
Es mi héroe. Es la única persona que supo como sacarme de mi infierno. Es lo que hizo que me sintiera como una princesa sin la necesidad de pasarme en el baño luego de comer. Es...
"¿Y?"
Nadie importante.







Quiero dejar el pasado atrás. Quiero aprender a respirar con mis propios pulmones. Quiero salir de esto, y que Mia se muera.
Por favor, quiero dejarlo atrás.
Por favor.

5.

Me sentaba a comer, y me daba asco.
Los problemas en mi familia cada vez eran mas grandes. Mi mamá peleaba mucho con mi papá, se sacaban cosas en cara, aunque nunca llegaron a violencia física.
Me encerraba a llorar en el baño, y comence a portar una navaja en mi billetera. Me cortaba siempre. Aunque debo reconocer que ese problema lo traía de antes.
Fue aproximadamente en 7º básico cuando empece a autoflagelarme. Tuve una discusión con mi amiga, una de esas que te dejan hasta mareada.
Me fuí a mi habitación y me azotaba contra la pared, me rasguñaba los brazos, hasta que las uñas no me dieron más y tome el cortacartón que estaba en el escritorio. La sensación fue... aliviadora.
Me sentí viva, como si cada vena de mi cuerpo enviara sangre a mi cerebro, como si todos mis músculos funcionaran. Me sentí viva.
Luego de eso no pude dejarlo.
Al igual que como me pasó con Mia.
Y miradme ahora.
Soy realmente patetica.





Amor, te extraño.

( )

Mi perdición.
Por mas que trato y trate de controlarme no puedo. Me doy atracones gigantes y luego de eso tengo que correr al baño.
Ya no traigo dinero en los bolsillos.
Me cuesta asumirlo:
Estoy enferma.








Saludos a la realeza.

4.

No podía.
Por un momento pensé que Mia me odiaba.

3.

Luego de un tiempo sin que la idea se me cruzara por la cabeza, reviví todo un día que mis padres pelearon.
De los nervios me empecé a marear, hasta qe termine vomitando.
Me corté los brazos y las piernas.
Cuando iba al colegio, dejaba el dinero justo para el pasaje.
Aprendí eso, ya que si llevaba mas dinero me lo gastaba todo en comida. A veces llebava dinero para comprar cigarros. Una amiga me dijo que a veces la gente bajaba de peso cuando comenzaba a fumar. Claro, ella no sabía lo que me preocupaba. A veces hacía comentarios delante de ella, o cuando me ofrecia comida, siempre se la negaba. "No estás gorda", me decía.
Aunque en el fondo sabía que estaba mintiendo.
Comencé a obsesionarme mas con la idea de bajar de peso cuando me dijeron que tenía que bailar en poca ropa para el colegio. Casi fallecí.
¿Como podía presentarme así? Con toda esa... asquerosidad sobrandome?
No.
Por otra parte, veía las fotos de Kiki Kannibal, de Dakota Rose... y porque yo no podía ser como ella?
Siempre eh sido de espalda ancha.
Odio mi cuerpo.
Mis hombros son amplios, mis piernas cortas y en desacorde al resto de mi cuerpo, mi abdomen sobresaliente, no tengo caderas, toda la ropa me queda mal, tampoco tengo trasero.
No quiero ser un palo. Tan solo una mujer con un cuerpo normal.