Tú.

Si yo fuera tú, tal vez pagaría y me reiría por verme así, por verme llorar, por cada sueño que tuve contigo. Compraría un paquete de palomitas de maíz y tomaría asiento en la primera fila. Me reiría de como mis amigas tratan de consolarme sin resultados, contándome chistes, diciendo cosas graciosas, dándome mil consejos para verme feliz.
Si yo fuera tú por tan solo un momento, me daría cuenta de cuanto te quiero, conseguiría mi número, me mandaría un mensaje, o tal vez volvería a hablar conmigo como antes. Tú mismo lo dijiste. "Antes me hablabas más incoherencias." Es que tú antes me hablabas más. Tú antes me hablabas.
Si yo fuera tú, me pediría algún día acompañarte a fumar un cigarro a Pedro de Valdivia, a la vuelta de tu casa, pues sabes bien que no me negaría jamás.
Si yo fuera tú, me hablaría no sólo cuando necesite algo.
Si yo fuera tú, seguiría contándome las historias del verano, esas que nadie más quería escuchar, y que nadie se daba el tiempo de analizar o disfrutar.
Si yo fuera tú, ya me hubiese dado cuenta de lo loca que estoy, de como a veces cambio radicalmente cuando estoy contigo. Si fuera tú, me daría cuenta siempre de como te miro, de como reacciona mi piel cuando la tocas, y mi cuerpo cuando me abrazas. Me aprovecharía más de eso. Más aún.
Si yo fuera tú, las cosas serían demasiado diferentes. Si yo fuera tú, y no un monstruo...









(Las fotos las tomo yo, si quieren usarlas por lo menos den créditos.)